CEPILLO DE DIENTES

Me he traído el cepillo de dientes eléctrico, pensé que era un poco caprichoso, pero al fin y al cabo, por qué no. Lo tengo escondido en el armario porque me da verguenza.

Sin embargo estas navidades me encontré con una californiana, una médica que estaba haciendo un estudio en Uganda sobre niños con SIDA,  y hablando sobre equipajes me contó que lo único que había traido "extra" era un cepillo de dientes eléctrico, pero que al enchufarlo debido a la diferencia de voltaje se estropeó el primer día. Cuatro meses después recibió un nuevo cepillo que su madre le había enviado (benditas sean las madres).

Otro argentino que he conocido y que trabaja en Argel construyendo una enorme planta desaladora en medio de ninguna parte, hablando del tema de la higiene me confesó que él había traído también un cepillo, uno de los grandes, con el aparato para el enjuague a presión, y que además había hecho que se lo colgaran en el barracón. Seguiré investigando sobre este tema.