Coger mangos en Sudán es cosa de niños, por cultura, por tradición, son ellos los recolectores. Muchas veces se pueden ver grupos de pequeños mirando hacia arriba con palos y cañas larguísimos.
Durante la guerra, la sombra de los mangos era uno de los sitios estratégicos dónde poner minas para privar al enemigo de alimento fácil.
Aún existen algunos mangos peligrosos.
Joder, que retorcidos somos los humanos... π
ResponderEliminar