Por las noches, cuando llueve, las ranas no me dejan dormir, hay muchas y croan muy alto.
Por las mañanas, los días de diario, el colegio que hay al lado de mi compound a las siete de la mañana llama a los alumnos, lo hacen a ritmo africano golpeando con una barra de hierro esta pieza oxidada que pertenece a una rueda de camión. Suena altísimo. Todas las escuelas tienen una de éstas.
Por las mañanas, sobre las 8 de la mañana, el hermoso camión que barre y friega simultaneamente las calles de mi pueblo al ritmo de unos estridentes pitidos (que ya quisieran para sí las megamáquinas excavadoras de la zona cero...) pasa justo por debajo de nuestra habitación, y deja como un jaspe los 2.000 metros cuadrados de parking que nos han colocado junto a casa.
ResponderEliminarLos fines de semana es de lo más divertido, cuando se juntan los últimos rezagados del botellón (desde el primer día, es el parking favorito de los más fiesteros del pueblo) con la maquinita que llega un poco antes porque tiene más trabajo que ningún día...
Ya sabes que cuando Esmeralda hace algo pone todo su empeño en ello, por estas, cuando duerme lo hace con todas sus fuerzas y ni botellón, ni maquinita barredora, ni rueda oxidada... no se entera de nada. Pero yo he tenido que dormir un año con tapones hasta hace 3 meses, que dos buenas razones no me lo permiten...
Echarás de menos esa rueda oxidada...
Un beso Vero!!
Me alegro mucho de leerte!!!! supngo que eso quiere decir que estáis volviendo a poco a poco a la vida normal...la verdad es que con el lirón que tienes al lado me temo que vas a pasar muuucho sueño....
ResponderEliminarun beos para los 4